Harry Potter y el Misterio del Príncipe es un gran insulto para los verdaderos fanáticos de la saga, que como yo, han leído los siete los libros. A partir de aquí hay una enorme cantidad de spoilers, ya están avisados. Comencemos por lo bueno, visualmente los efectos son increíbles; la escena en la que los mortífagos destruyen el puente de Londres, el juego de Quiditch que tiene mucho más dinamismo y la pelea de Dumbledore contra los Inferi dejará con ganas de más a los espectadores.

Ahora lo malo. Se entiende que es muy difícil que una película sea fiel al libro, especialmente con historias de este tipo en las que hay gran cantidad de información y detalles que al final tienen que ser eliminadas por un tema económico; pero eso no justifica que cambien el sentido de la historia, eliminen información de gran importancia y que inventen escenas absurdas. David Yates ha cometido grandes errores en la película, pero lo más imperdonable fue haber convertido este libro en una comedia romántica para adolescentes, cualquiera es capaz de notar que las escenas entre Ginny y Harry son las más forzadas de la película y la relación entre Lavender-Ron-Hermione es la parte más cómica del libro, pero no ocupa el 50% de la historia.

Quedaron muchos vacíos sin explicar, la historia del sexto libro gira en torno a los recuerdos que tiene Dumbledore de Tom Riddle cuando estudiaba en Hogwarts, los únicos que usaron fueron los de su primer encuentro y la conversación de Tom con Slugwort. Se omitieron la historia de los padres de Voldemort y su descendencia familiar, que eran los que explicaban el anillo de Dumbledore y la mención de otros dos Horrocruxes que tiene que buscar Harry.

El ataque a la Madriguera es una escena inventada y absurda. Después de la muerte de Sirius Black en La Orden del Fénix, la casa de los Weasley se convierte en el nuevo cuartel de La Orden, por lo que está protegida con los hechizos más poderosos para evitar ser encontrados, parece que Yates olvidó eso y mandó dos mortífagos a destruir la casa. Ese fue uno de sus trucos para justificar la falta de acción que hay en la película, ya que el combate final fue un CHISTE. Pero la peor omisión fue el entierro de Dumblodore, sencillamente imperdonable.

Y lo mejor de todo es que nunca explicaron la razón de ser del Príncipe Mestizo, llamado así porque la madre de este personaje se apellidaba Prince y su padre era un muggle (persona sin magia), de ahí viene el juego de palabras. Ahora solo queda esperar el estreno de la última película que será dividida en dos partes para no eliminar detalles; esperemos que por ser el final no vuelva a ser otra decepción más.